
Leprechaun Riches
El amanecer comenzaba a arrojar luces brumosas sobre la tierra ondulada y los vientos soplaban alrededor de la vieja torre irlandesa. El duende estaba sentado en el borde de la ventana de la torre, golpeando con clavos un zapatito mientras silbaba una melodía alegre.
Sólo mide quince centímetros y es más difícil de atrapar que un fuego fatuo. ¡Si puedes atraparlo, te traerá su maravillosa olla de oro del final del arco iris y te concederá tres deseos!